Édgar Escamilla
Poza Rica, Ver.- Bajo un sol abrasador y una temperatura arriba de los 30 grados, Fernando Manzano Cervantes, mejor conocido como Papá Tortuga, contempla el producto del esfuerzo de cuidar el arribo de las tortugas, el traslado de los nidos y su cuidado hasta el momento de su eclosión.
En medio de la pandemia por coronavirus, un grupo de voluntarios no deja de trabajar para salvaguardar la vida de miles de crías de tortuga marina que anualmente eclosionan en los nidos del campamento Vida Milenaria, ubicado en el municipio de Tecolutla.
De la mano de su esposa Irma Galván, ha sacado adelante el campamento tortuguero que cumplirá 46 años.
Aquí arriban cada temporada tortugas de las especies Verde, Lora y Carey. El año pasado lograron resguardar 600 nidos, cifra que este año esperan superar, en parte, a las restricciones de acceso a las playas con motivo de la contingencia sanitaria.
Una visitante asidua es Rafaela, una tortuga en observación, la cual viaja por todo el Golfo de México y parte de la costa Este de los Estados Unidos. Esta hembra les ha permitido corroborar que las tortugas regresan a anidar a la costa donde nacieron.
Emocionada, la señora Irma relata que gracias a los registros, se pudo comprobar que Rafaela volvió prácticamente al mismo lugar, por una diferencia de 15 metros, por lo que ya pueden anticipar dónde volverá a poner sus huevos.
En días pasados recibieron la visita de una tortuga de la especie verde, de aproximadamente dos años, la cual posee una placa en la aleta derecha, con datos de Xcaret; lo que quiere decir que viajó mas de 1200 kilométros desde el Caribe hasta las costas de Tecolutla. Este animal forma parte de un programa de iniciación en aquella ciudad, en el que liberaron 150 tortugas que estuvieron un año y medio en cautiverio.
Respecto a las locales, este año han observado el arribo de al menos a 20 ejemplares, nacidos en la jurisdicción del campamento, según lo demuestran las placas en sus aletas.
Para festejar su cumpleaños y el 46 aniversario de Vida Milenaria, se realizó una reintegración masiva de crías, cerca de ocho mil tortugas nacidas en Tecolutla; lo que significa un importante logro si se tiene en cuenta que durante el primer año de su creación, solo se liberaron 500 tortuguitas.
Con motivo de la contingencia, el evento se realizó de manera privada; sin embargo, Papá Tortuga compartió imágenes y la transmisión en vivo de tan importante evento para la conservación de la tortuga marina.
